Xàbia, un popular destino turístico en la Costa Blanca, se enfrenta a un inicio de temporada estival marcado por la falta de medidas de seguridad en sus playas y calas. A medida que los bañistas comienzan a llegar en masa, la ausencia de boyas de balizamiento y de control de acceso a las zonas costeras plantea serias preocupaciones sobre la seguridad y la sostenibilidad del entorno marino.
La situación es alarmante, ya que las boyas que delimitan las áreas de baño aún no han sido instaladas, lo que deja a los bañistas expuestos a la presencia de embarcaciones en zonas donde deberían estar protegidos. Las motos de agua, por ejemplo, han irrumpido en la cala de la Granadella, generando situaciones de riesgo que podrían haberse evitado con un adecuado balizamiento. La falta de boyas de fondeo en lugares críticos como la Cala Blanca y el Cap Negre también contribuye a la problemática, ya que permite que las embarcaciones anclen en áreas donde se encuentran praderas de posidonia, un ecosistema marino vital.
El portavoz del PSPV, José Chulvi, ha criticado la inacción del gobierno local, compuesto por PP, CpJ y Vox, acusándolos de dejadez en la gestión de estos asuntos. Chulvi ha enfatizado que la balización de las playas es esencial no solo para la seguridad de los bañistas, sino también para la protección de los fondos marinos. La falta de medidas adecuadas podría resultar en un daño irreversible a la biodiversidad marina, lo que a su vez afectaría a la calidad del turismo que Xàbia ofrece.
### La Saturación Turística y sus Consecuencias
Con la llegada del verano, Xàbia experimenta un aumento significativo en la afluencia de turistas. Sin embargo, este incremento no ha sido acompañado por una planificación adecuada para gestionar el flujo de visitantes. La saturación turística se ha convertido en un problema recurrente, especialmente en las calas más populares. Este fin de semana, la Granadella ya vivió un caos de coches, lo que pone de manifiesto la necesidad urgente de implementar un control de acceso efectivo.
La licitación para el control de acceso a las calas de la Barraca y la Granadella está en marcha, pero los plazos de adjudicación son largos y complicados. El contrato, que tiene un valor de 103.098 euros y es prorrogable por un año adicional, incluye la gestión del aparcamiento regulado. Sin embargo, la falta de un sistema de control efectivo significa que las calas podrían seguir enfrentándose a problemas de masificación, lo que no solo afecta la experiencia de los visitantes, sino que también pone en riesgo la seguridad de los servicios de emergencia.
Chulvi ha señalado que el retraso en la implementación de estas medidas representa un retroceso en la seguridad y la sostenibilidad del destino. La ausencia de control en las calas no solo genera descontrol en el aparcamiento, sino que también impide que vehículos de emergencia puedan acceder a las áreas en caso de necesidad. Esto es especialmente preocupante en un entorno donde la seguridad de los bañistas y la protección del medio ambiente deberían ser prioridades.
### La Necesidad de Medidas Inmediatas
La situación actual en Xàbia exige una respuesta rápida y efectiva por parte de las autoridades locales. La falta de boyas de balizamiento y de control de acceso no solo pone en riesgo la seguridad de los bañistas, sino que también amenaza la sostenibilidad del entorno marino. La presión turística sobre las calas y playas de Xàbia es cada vez mayor, y sin las medidas adecuadas, el destino podría perder su atractivo a largo plazo.
El concejal socialista Josep Vicent Miralles ha recordado que las medidas de ordenación del litoral han permitido avanzar en sostenibilidad y fomentar un turismo más responsable. Sin embargo, el retroceso en la implementación de estas medidas podría significar la pérdida de los avances logrados en los últimos años. La comunidad local y los visitantes merecen un entorno seguro y protegido, y es responsabilidad de las autoridades garantizar que se tomen las acciones necesarias para lograrlo.
En resumen, Xàbia se enfrenta a un verano complicado, donde la falta de medidas de seguridad y control en sus playas y calas podría tener consecuencias graves. La comunidad y los turistas esperan que las autoridades actúen con rapidez para asegurar un entorno seguro y sostenible, que permita disfrutar de la belleza natural de la región sin comprometer su integridad.