La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha llevado a cabo una reunión en València con cerca de 80 alcaldes de localidades que sufrieron los efectos devastadores de la dana ocurrida el pasado 29 de octubre. Durante este encuentro, Díaz presentó una ampliación del plan de empleo que fue aprobado poco después de la catástrofe, destacando la asignación de 80 millones de euros adicionales a esta iniciativa. En su primera fase, el plan contaba con un presupuesto inicial de 50 millones, lo que permitió la creación de 8.000 puestos de trabajo.
Entre las modificaciones más significativas que se han introducido en este nuevo tramo del plan, se encuentra la inclusión de ocupaciones más cualificadas, como ingenieros y arquitectos, en respuesta a las demandas de los municipios afectados. Además, se ha decidido que los ayuntamientos seguirán siendo los principales beneficiarios de estas ayudas, aunque ahora también se abrirá la posibilidad de que entidades sin ánimo de lucro y ONG puedan participar en el proceso. La ministra ha expresado su objetivo de alcanzar 7.500 nuevas altas laborales a través de esta ampliación.
En la reunión, Díaz estuvo acompañada por la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, quien recibió elogios por su dedicación y trabajo tras la tragedia. También estuvo presente la comisionada para la Reconstrucción, Zulima Pérez. La ministra subrayó la importancia de la autoevaluación en la política para poder corregir aquellos aspectos que no están funcionando adecuadamente. En este sentido, Díaz aseguró que este segundo tramo del plan de empleo será más ágil y eficiente, destacando que hasta la fecha se han ejecutado 35,5 millones de euros desde el inicio del año.
La vicepresidenta enfatizó que los alcaldes de diferentes partidos políticos han acogido la propuesta con satisfacción, lo que refleja un consenso en la necesidad de actuar rápidamente. Díaz no había visitado València desde enero, cuando se presentó el primer plan de empleo, y ha querido utilizar esta visita como un mensaje político, resaltando que su presencia en la región es para ser útil y no solo para captar atención mediática. «Lo importante es acompañar a la ciudadanía no solo en los momentos críticos, sino también en el proceso de reconstrucción posterior», afirmó.
En su discurso, Díaz defendió la política que busca mejorar la vida de los ciudadanos, citando ejemplos como la reforma laboral y el escudo social de los ERTEs implementados durante la pandemia de COVID-19. La ministra se mostró firme en su postura de que la política debe ser una herramienta para el bienestar social, y no un espacio para el ruido político. Al referirse a las críticas del Partido Popular, que considera que el Gobierno central no está coordinándose adecuadamente, Díaz aclaró que mantiene una «magnífica relación» con la Generalitat y que su enfoque es siempre cooperar y trabajar en beneficio de la comunidad.
La reunión en València se enmarca en un contexto de creciente preocupación por la recuperación de las zonas afectadas por la dana, y la respuesta del Gobierno es vista como un paso crucial para la reactivación económica y social de estas localidades. La ministra ha reiterado su compromiso de estar presente en los momentos que realmente importan, asegurando que su labor no se limita a la gestión de crisis, sino que se extiende a la construcción de un futuro más sólido para la ciudadanía.
El plan de empleo ampliado no solo busca generar puestos de trabajo, sino también fomentar la inclusión de perfiles profesionales que son esenciales para la reconstrucción de infraestructuras y servicios en las áreas afectadas. La inclusión de ingenieros y arquitectos es un claro indicativo de que el Gobierno está tomando en cuenta las necesidades específicas de cada localidad, adaptando las políticas a la realidad del terreno.
La ministra también hizo hincapié en la importancia de la colaboración entre diferentes niveles de gobierno y la sociedad civil para lograr una recuperación efectiva. La participación de ONG y entidades sin ánimo de lucro es un paso significativo hacia una estrategia más inclusiva y diversa en la creación de empleo y la atención a las necesidades de la población afectada.
Con este nuevo impulso, el Gobierno de España busca no solo mitigar los efectos inmediatos de la catástrofe, sino también sentar las bases para un desarrollo sostenible y resiliente en las comunidades que han sufrido las consecuencias de la dana. La respuesta a esta crisis se presenta como una oportunidad para transformar y mejorar la vida de los ciudadanos, asegurando que no solo se atiendan las necesidades urgentes, sino que también se construya un futuro más prometedor.