La Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, bajo la dirección de Marián Cano, ha dado un paso significativo en la lucha contra el cambio climático al respaldar la creación de un laboratorio urbano en Riba-roja de Túria. Este espacio, diseñado para fomentar la innovación tecnológica y la resiliencia climática, fue presentado por Juan José Cortés, director general de Innovación, durante la jornada titulada «Sandboxes Comunidad Valenciana: colaboración para la innovación», que tuvo lugar en Dinapsis Valencia.
Este laboratorio urbano, conocido como ‘Riba sandbox’, se establece como un entorno controlado donde universidades, institutos tecnológicos, centros de investigación y empresas podrán experimentar y validar soluciones innovadoras. El objetivo es elevar la resistencia de las ciudades frente a los efectos adversos del cambio climático. Cortés destacó que este tipo de iniciativas son fundamentales para enfrentar los retos de gran magnitud que presenta el cambio climático, y subrayó la importancia de la colaboración público-privada en este proceso.
El proyecto, que cuenta con un apoyo financiero de 69.000 euros, es parte del programa ‘Territoris Innovadors’, que busca fomentar la innovación en diversas áreas. Cortés instó a los agentes del ecosistema de innovación a unirse al convenio marco aprobado recientemente por el Ayuntamiento de Riba-roja de Túria, que regula la participación de terceros en este nuevo laboratorio de resiliencia climática.
### Impulso a la Innovación y la Sostenibilidad
La creación del ‘Riba sandbox’ se suma a otros tres entornos controlados de prueba que la Conselleria respalda a través de Ivace+i Innovación. Estos laboratorios abarcan áreas como la modernización y transformación de las ciudades, el ciclo integral del agua y la innovación en procesos hospitalarios ecosostenibles. En total, el departamento ha destinado cerca de 430.000 euros en ayudas para fomentar estas iniciativas.
Uno de los proyectos más avanzados es el que se desarrolla en Alcoi, donde desde 2023 se han estado probando tecnologías y servicios en contextos reales. Este laboratorio ha permitido que una decena de grupos de investigación y empresas validen sus innovaciones antes de lanzarlas al mercado, contribuyendo así al dinamismo del tejido productivo local.
Por otro lado, Aguas de Alicante ha activado su propio ‘sandbox’ para identificar tecnologías innovadoras que aborden los retos del ciclo integral del agua. Este enfoque busca implementar herramientas pioneras que impulsen la colaboración entre el sector público y privado, favoreciendo un ecosistema innovador que responda a las necesidades locales.
En el ámbito de la salud, la Fundación Incliva, vinculada al Hospital Clínico Universitario de Valencia, ha establecido un laboratorio de pruebas con el apoyo de Ivace+i Innovación. Este laboratorio se centra en la detección y priorización de necesidades para optimizar procesos hospitalarios ecosostenibles, creando un entorno propicio para evaluar nuevas ideas y tecnologías que promuevan la sostenibilidad en el sector sanitario.
### La Importancia de la Colaboración Público-Privada
La colaboración entre el sector público y privado es un elemento clave en el desarrollo de estos laboratorios. Juan José Cortés enfatizó que esta fórmula resulta estratégica para abordar los desafíos que enfrenta la sociedad actual, especialmente en el contexto del cambio climático. La participación activa de las empresas en estos proyectos no solo facilita la incorporación de nuevas tecnologías, sino que también permite a las administraciones públicas adoptar soluciones innovadoras a través de procedimientos de Compra Pública de Innovación.
El ‘Riba sandbox’ se presenta como una oportunidad única para que las entidades locales, universidades y empresas trabajen juntas en la búsqueda de soluciones efectivas para los problemas climáticos. Este enfoque colaborativo no solo beneficiará a Riba-roja de Túria, sino que también puede servir como modelo para otras localidades que deseen implementar iniciativas similares.
La creación de laboratorios urbanos como el de Riba-roja es un paso hacia un futuro más sostenible, donde la innovación y la tecnología juegan un papel crucial en la adaptación y mitigación de los efectos del cambio climático. A medida que más ciudades adopten este enfoque, se espera que surjan soluciones creativas y efectivas que ayuden a construir comunidades más resilientes y preparadas para enfrentar los desafíos del futuro.