La sanidad pública en la Comunitat Valenciana está a punto de experimentar un cambio significativo en su funcionamiento. A partir del 1 de octubre, los hospitales valencianos implementarán un horario vespertino para consultas y cirugías menores, una medida que busca mejorar la accesibilidad de los pacientes a los servicios de salud. Esta decisión, anunciada por la Conselleria de Sanidad, se ha comunicado a los 24 departamentos de salud de la región, quienes deberán adaptarse a esta nueva normativa.
La iniciativa no es completamente nueva, ya que algunos centros han estado ofreciendo citas en horario vespertino de manera voluntaria. Sin embargo, a partir de ahora, esta práctica se convertirá en una obligación generalizada, siempre que las condiciones lo permitan. El nuevo horario se establecerá de lunes a jueves, con dos opciones: de tres de la tarde a diez de la noche o de dos de la tarde a nueve de la noche. Esta flexibilidad horaria está diseñada para facilitar la atención a los pacientes y optimizar el uso de los recursos disponibles.
Cada hospital deberá definir su horario específico para las distintas actividades y especialidades, diferenciando entre consultas médicas y asistencias quirúrgicas. Además, se requerirá que cada centro especifique el número de citas disponibles en las tardes, teniendo en cuenta el tipo de pacientes y procedimientos. Esta estrategia incluirá una revisión mensual del funcionamiento del nuevo horario durante el primer trimestre de su implementación.
### Impacto en el Personal Sanitario
Uno de los aspectos más destacados de esta nueva medida es que los médicos podrán trabajar hasta seis tardes al mes, pero no podrán realizar consultas por la mañana en esos días. Esto significa que la cantidad de citas disponibles no aumentará, sino que simplemente se redistribuirán a lo largo de la semana. Cada médico tendrá un tiempo máximo de entre 10 y 15 minutos por paciente, ya sea en consultas presenciales o telemáticas.
Por otro lado, el personal no facultativo no tendrá un límite en el número de tardes que puede trabajar, siempre que respete su jornada semanal de 37,5 horas. Esta flexibilidad podría ser beneficiosa para optimizar la atención, pero también plantea preocupaciones sobre la carga de trabajo y la conciliación laboral y familiar del personal sanitario.
La posibilidad de movilidad funcional interna también se ha incluido en las nuevas instrucciones. Esto significa que los directores de los hospitales podrán trasladar a los profesionales a diferentes centros o servicios si se justifica la necesidad de recursos para ofrecer consultas o realizar cirugías menores. Sin embargo, esta medida ha generado inquietud entre los sindicatos, que temen que la movilidad no sea voluntaria y que afecte negativamente a los trabajadores.
### Limitaciones en las Cirugías y Consultas
Es importante señalar que el nuevo horario vespertino no se aplicará a todas las cirugías. Las intervenciones de alta complejidad no podrán programarse por las tardes, lo que limita la capacidad de los hospitales para atender a pacientes que requieren procedimientos más complejos. Solo se permitirán cirugías de grado I y II, que incluyen procedimientos menos invasivos como biopsias o hernias.
En cuanto a las consultas de alta complejidad, estas se programarán cada 15 días, lo que podría generar un aumento en las listas de espera para ciertos pacientes. Por el contrario, se espera que los gabinetes de exploraciones, donde se realizan pruebas como endoscopias, atiendan pacientes dos tardes a la semana para las especialidades más prioritarias.
La implementación de este nuevo horario es parte de un esfuerzo más amplio por parte de la Conselleria de Sanidad para reducir las listas de espera en la atención ambulatoria y quirúrgica. Sin embargo, muchos profesionales de la salud se preguntan cómo se logrará este objetivo sin un aumento en el número de personal sanitario. La Generalitat Valenciana ya destina una parte significativa de su presupuesto a la remuneración de los trabajadores de la salud, lo que complica la posibilidad de contratar más profesionales.
A medida que se acerca la fecha de implementación, la comunidad sanitaria observa con atención cómo se desarrollará este cambio y qué impacto tendrá en la calidad de la atención al paciente. La falta de recursos y la presión sobre el personal son temas que seguirán siendo objeto de debate en el futuro cercano, mientras que los pacientes esperan que estas nuevas medidas realmente mejoren su acceso a la atención médica.