La exmilitante del PSOE, Leire Díez, se presentó ante la comisión del Senado que investiga los contratos relacionados con el ‘caso Koldo’, donde reiteró su inocencia y defendió su papel como periodista. Durante su comparecencia, que tuvo lugar el 8 de septiembre de 2025, Díez negó cualquier relación personal o política con Santos Cerdán, exnúmero 3 del PSOE, y afirmó que su interacción se limitó a encuentros en actos públicos. «No he tenido cargo orgánico en mi vida en el PSOE, lo de bien relacionada no es cierto», enfatizó ante la senadora del grupo Mixto, María del Mar Caballero.
La exmilitante también se refirió a las acusaciones que la vinculan con el caso, donde se le acusa de ofrecer tratos de favor a empresarios a cambio de información sensible sobre miembros de la Guardia Civil. A pesar de las preguntas incisivas de los senadores, especialmente del PP, Díez mantuvo su postura y se defendió de las acusaciones, afirmando que su investigación tiene como objetivo exponer el mal funcionamiento de las instituciones y no está relacionada con el PSOE.
### La defensa de Leire Díez
Durante su intervención, Leire Díez se mostró firme en su defensa, afirmando que su trabajo como periodista la llevó a investigar irregularidades en el sistema judicial y político. «No soy fontanera, sino periodista», insistió, en respuesta a las insinuaciones de que su trabajo podría estar vinculado a maniobras políticas. Además, hizo hincapié en que su investigación no busca proteger a ningún partido político, sino que se centra en el Estado de Derecho.
Díez también mencionó que posee pruebas documentales que respaldan sus afirmaciones, incluyendo dos millones de documentos y 10,000 audios que, según ella, demuestran la existencia de manipulaciones en el pasado, especialmente durante el gobierno del PP. Afirmó que su objetivo es que situaciones como las que vivió el empresario Javier Pérez Dolset, a quien describió como víctima de la «policía patriótica», no se repitan.
La exmilitante del PSOE también se defendió de las acusaciones de extorsión, afirmando que nunca ha extorsionado a nadie y que las acusaciones en su contra son infundadas. En respuesta a las preguntas sobre su relación con la UCO y otros miembros de la Guardia Civil, optó por no responder, citando la judicialización del asunto.
### La tensión en la comisión
La comparecencia de Leire Díez no estuvo exenta de tensión. Durante el interrogatorio, el senador del PP, Joaquín Miranda, cuestionó su credibilidad y la acusó de estar involucrada en prácticas poco éticas. La respuesta de Díez fue contundente: «Usted está quizá acostumbrado a extorsionar, pero me ha acusado y yo no he extorsionado a nadie en mi vida». Este intercambio marcó un momento álgido en la sesión, evidenciando la polarización política en torno al caso.
Además, Díez se refirió a la relación entre periodistas y fuerzas de seguridad, criticando a aquellos que, según ella, utilizan información para perjudicar a adversarios políticos. «Tenemos decenas de anotaciones, apuntes y pruebas contra esos periodistas», afirmó, sugiriendo que las prácticas de manipulación informativa son un problema persistente en la política española.
La exmilitante también se comprometió a publicar su investigación en un libro, reiterando que su trabajo es para el Estado de Derecho y no para el PSOE. A lo largo de su intervención, dejó claro que su intención es contribuir a la transparencia y la justicia, y no ser parte de un juego político que busca desacreditar a sus oponentes.
La comparecencia de Leire Díez en el Senado ha puesto de relieve las complejidades del ‘caso Koldo’ y las tensiones entre los diferentes actores políticos. A medida que avanza la investigación, la atención se centra en cómo se desarrollarán los acontecimientos y qué implicaciones tendrá para los involucrados, tanto en el ámbito político como en el judicial.