La lactancia materna es un tema de vital importancia que ha cobrado relevancia en los últimos años, especialmente durante la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se celebra del 1 al 7 de agosto. Especialistas en salud, como los de Quirónsalud, han destacado la necesidad de un apoyo adecuado durante los primeros días tras el nacimiento para asegurar el éxito en la lactancia. Este apoyo no solo es técnico, sino también emocional, y su importancia radica en que puede marcar la diferencia entre una lactancia exitosa y la necesidad de recurrir a fórmulas artificiales prematuramente.
### Beneficios de la Lactancia Materna para el Bebé
La lactancia materna no solo proporciona alimento, sino que también actúa como una poderosa herramienta de protección para la salud del bebé. La leche materna es un alimento completo, adaptado a cada fase del desarrollo del recién nacido. Contiene inmunoglobulinas, células vivas, enzimas y factores antiinflamatorios que refuerzan el sistema inmune del bebé desde el primer día. Esto es especialmente crucial en el caso de los bebés prematuros, ya que la leche materna puede disminuir el riesgo de complicaciones graves como la enterocolitis necrotizante y favorecer el desarrollo neurológico y la maduración intestinal.
Además, se ha demostrado que la lactancia materna reduce la incidencia de alergias, obesidad infantil y diabetes tipo 1. También tiene un efecto protector a largo plazo frente a enfermedades crónicas, lo que la convierte en una práctica esencial para el bienestar infantil. La doctora Adalgisa de Caro, pediatra de la UCI neonatal del Hospital Quirónsalud Murcia, enfatiza que la leche materna actúa como una vacuna natural, protegiendo a los bebés de infecciones gastrointestinales, respiratorias, urinarias y otitis, entre otras.
### Estrategias para una Lactancia Exitosa
Para asegurar una lactancia exitosa, es fundamental prestar atención a la técnica y la postura durante la toma. Las posiciones ventrales o biológicas, donde la madre se encuentra reclinada y el bebé está en prono sobre su cuerpo, permiten agarres más profundos y activan los reflejos innatos del recién nacido. Esta postura es especialmente útil en casos de frenillo sublingual o retrognatia, donde puede haber dificultades para el agarre.
Otro aspecto clave es la lactancia a demanda. Esto significa que no se deben establecer horarios fijos ni tiempos limitados para las tomas. El llanto es un signo tardío de hambre, y si se espera a que el bebé llore, el agarre puede volverse más difícil y el bebé puede estar más agitado. Se recomienda ofrecer el pecho entre 10 y 12 veces al día, permitiendo que el bebé vacíe un pecho completamente antes de ofrecer el otro. Este método no solo asegura que el bebé reciba suficiente leche, sino que también estimula la producción de leche materna.
Además, es aconsejable evitar el uso de tetinas y chupetes durante el primer mes, siempre que la ganancia de peso del lactante sea adecuada y no existan dificultades en la succión. Estos elementos pueden interferir en el aprendizaje correcto del agarre al pecho y dificultar el establecimiento exitoso de la lactancia. La información y el apoyo desde el inicio son cruciales para prevenir problemas que puedan llevar a la interrupción de la lactancia.
La lactancia materna es, sin duda, un proceso que requiere tiempo, paciencia y apoyo. Las madres deben sentirse empoderadas y respaldadas en su decisión de amamantar, y es esencial que reciban la información adecuada para superar cualquier obstáculo que pueda surgir. La comunidad médica y el entorno familiar juegan un papel fundamental en este proceso, brindando el apoyo necesario para que las madres puedan disfrutar de esta experiencia única y beneficiosa tanto para ellas como para sus bebés.