Un incendio ha estallado en la segunda planta de un edificio en Torrent, que había sido gravemente afectado por una dana y declarado en ruinas. Este incidente ha dejado a dos personas heridas, un hombre de 29 años y una mujer de 27, quienes se encontraban en el interior del inmueble en el momento del siniestro. Ambos han sido evacuados y trasladados a un centro hospitalario para recibir atención médica, aunque sus heridas no revisten gravedad.
El edificio, ubicado en la calle Maestro Fortea, ha estado clausurado y precintado desde el 29 de octubre del año anterior, debido a un informe de arquitectos que recomendaba su demolición. La situación se ha complicado aún más por la existencia de más de 40 vecinos afectados, cada uno con su propia situación de propiedad, lo que ha retrasado la resolución definitiva sobre el futuro del inmueble.
### Un Edificio en Crisis
La historia de este edificio es un reflejo de la crisis que ha enfrentado la comunidad de Torrent tras la dana. Desde que el inmueble fue precintado, ha sido objeto de saqueos y ocupaciones ilegales. A pesar de la vigilancia policial, los ladrones han encontrado formas de acceder al edificio, aprovechando los daños estructurales causados por la tormenta. Se han reportado robos de grifería, cableado, ventanas y puertas, lo que ha dejado el edificio en un estado aún más deplorable.
El ayuntamiento de Torrent ha informado que el edificio se encuentra en la confluencia de los barrancos del Horteta y del Poyo, lo que lo hace especialmente vulnerable a las inclemencias del tiempo. La situación se ha vuelto insostenible para los propietarios, quienes no solo han tenido que lidiar con la pérdida de sus hogares, sino también con la angustia de ver cómo intrusos destrozan sus propiedades.
El incendio, que se produjo en la mañana del domingo, fue reportado a las 7:53 horas. Cuatro dotaciones de bomberos de Torrent y Catarroja, junto con un sargento, fueron movilizadas para controlar la situación. Afortunadamente, los bomberos lograron rescatar a las dos personas atrapadas en el interior antes de que el fuego se propagara más allá de la segunda planta. Tras extinguir las llamas, los bomberos aseguraron la zona para prevenir futuros incidentes.
### La Respuesta de las Autoridades
El ayuntamiento ha estado trabajando en la evaluación de los daños y en la planificación de la demolición del edificio, pero el proceso se ha visto obstaculizado por la complejidad de la situación de los vecinos afectados. Cada uno de ellos tiene una historia particular, y la burocracia necesaria para resolver sus casos ha ralentizado la respuesta de las autoridades.
Desde el desalojo inicial de los números 5 y 7 de la manzana, que se realizó debido al peligro que representaba el torrente de agua, la situación ha continuado deteriorándose. A pesar de los esfuerzos por parte de la Policía Local para mantener el orden, las ocupaciones ilegales han persistido, lo que ha llevado a un ciclo de desalojo y reocupación que parece no tener fin.
La situación es un claro ejemplo de cómo las catástrofes naturales pueden desencadenar una serie de problemas sociales y estructurales que afectan a las comunidades locales. La falta de soluciones rápidas y efectivas ha dejado a muchos residentes en una situación precaria, sin un lugar seguro al que llamar hogar.
El incendio en el edificio en ruinas de Torrent es solo un capítulo más en la historia de una comunidad que ha enfrentado desafíos significativos desde la dana. La necesidad de una respuesta coordinada y efectiva por parte de las autoridades es más urgente que nunca, no solo para garantizar la seguridad de los residentes, sino también para restaurar la confianza en la capacidad de la administración local para manejar crisis de esta magnitud.
