La construcción de la gigafactoría de PowerCo en Sagunt está en marcha, y con ella, se han generado importantes movimientos en el ámbito de la energía renovable y la expropiación de terrenos. La Generalitat ha decidido expropiar los terrenos necesarios para la planta fotovoltaica que abastecerá a esta gigafactoría, un proyecto que ha suscitado tanto expectativas como inquietudes entre los agricultores locales.
### Proceso de Expropiación y Arrendamiento
La Generalitat de Valencia ha confirmado que procederá a expropiar los terrenos que se destinarán a la planta fotovoltaica, la cual se ubicará al norte de Sagunt, en una extensión de 2,5 millones de metros cuadrados, mayoritariamente ocupada por naranjos. Este proceso ha generado incertidumbre entre los agricultores que actualmente cultivan en esta zona, ya que no está claro si recibirán una compensación por la expropiación o si se les ofrecerá un alquiler a largo plazo.
El parque solar, que será fundamental para el autoconsumo de la gigafactoría de Volkswagen, ocupará 250 hectáreas, lo que equivale a aproximadamente 500 campos de fútbol. Según las fuentes consultadas, el arrendamiento que deberá pagar la empresa adjudicataria a la Generalitat rondará los 2,7 millones de euros por un periodo de 25 años. Este compromiso se enmarca dentro de un acuerdo más amplio entre el Consell y Volkswagen, que condicionó su inversión en Valencia a la disponibilidad de suelo para esta planta.
La Generalitat asumirá el costo de la expropiación, manteniendo la propiedad del terreno. En el caso de la gigafactoría, la administración pagó a los agricultores un precio de 63 euros por metro cuadrado, lo que resultó en una transacción total de 63,66 millones de euros por la parcela de 1,29 millones de metros cuadrados destinada a la planta de producción de baterías.
### Implicaciones para los Agricultores y el Entorno
La incertidumbre sobre el proceso de expropiación ha generado preocupación entre los agricultores de la zona. Muchos de ellos no tienen claro si la administración les expropiará sus tierras o si se les ofrecerá un alquiler. Este tipo de situaciones puede llevar a tensiones entre los intereses económicos de la industria y la necesidad de preservar la actividad agrícola en la región.
El proyecto de la planta fotovoltaica ha sido declarado Proyecto Territorial Estratégico, lo que implica que se le reconoce un interés público y social, facilitando así el proceso de expropiación forzosa. Sin embargo, la falta de claridad sobre los precios de expropiación y la lista de propietarios afectados ha generado un ambiente de incertidumbre que podría complicar aún más la situación.
Por otro lado, el desarrollo de la gigafactoría y la planta fotovoltaica representa una oportunidad significativa para la región, no solo en términos de inversión económica, sino también en la creación de empleo y el impulso a la transición energética. La planta fotovoltaica está diseñada para funcionar de manera autónoma y se dividirá en tres secciones, todas ubicadas a tres kilómetros de la gigafactoría, lo que permitirá un suministro eficiente de energía.
### Desafíos en la Ejecución del Proyecto
A pesar de los avances en la planificación, el proceso de adjudicación para la construcción de la planta fotovoltaica aún está en curso. PowerCo ha decidido abrir un concurso para la ejecución del proyecto, lo que ha llevado a la compañía a descartar su intención inicial de adjudicarlo a Iberdrola. Esta decisión se ha visto influenciada por la caída del 22% en los costos de construcción de parques fotovoltaicos en el último año y medio, lo que ha llevado a la empresa a buscar un acuerdo más competitivo en términos de precios de electricidad.
El plazo de operación previsto para la planta es de 25 años, y aunque inicialmente se esperaba que las obras comenzaran en septiembre de este año, ahora se ha pospuesto el inicio para el segundo semestre de 2027. Esta demora podría afectar no solo la planificación del proyecto, sino también la percepción pública sobre la capacidad de la administración y las empresas involucradas para llevar a cabo un proyecto de tal envergadura.
La inversión estimada para la construcción de la planta fotovoltaica es de aproximadamente 112 millones de euros, lo que subraya la importancia económica del proyecto. Sin embargo, la falta de claridad en los plazos y en el proceso de adjudicación podría generar desconfianza entre los inversores y la comunidad local.
El desarrollo de la gigafactoría de PowerCo y la planta fotovoltaica en Sagunt representa un paso significativo hacia la sostenibilidad y la innovación en la industria automotriz y energética. Sin embargo, es crucial que se aborden las preocupaciones de los agricultores y se garantice un proceso transparente y justo en la expropiación de terrenos para asegurar el éxito a largo plazo de este ambicioso proyecto.