La mañana del 16 de septiembre de 2025 se ha visto marcada por una serie de accidentes que han provocado importantes retenciones en las principales vías de acceso a Valencia. Los conductores que circulan por la V-30 en dirección al Puerto de Valencia han tenido que lidiar con un tráfico complicado debido a un camión averiado y un choque múltiple que afectó a varios vehículos. Estos incidentes han generado un colapso significativo en la circulación, especialmente en el carril izquierdo de la vía, aunque afortunadamente no se han reportado heridos.
El primer incidente ocurrió en la V-30, a la altura de Quart de Poblet, donde un camión averiado ocupó el carril derecho, lo que ya había comenzado a causar congestión. Poco después, un choque entre varios vehículos en el carril izquierdo intensificó la situación, llevando a los conductores a experimentar una espera prolongada. A medida que los vehículos involucrados en el accidente comenzaron a retirarse, la circulación mejoró, pero el impacto inicial había dejado su huella en el tráfico de la mañana.
En paralelo, la A-7 también se vio afectada por un accidente en Bétera, donde varios vehículos colisionaron, cerrando el carril izquierdo y generando más de 10 kilómetros de retenciones en dirección a Castellón. Este incidente, que tuvo lugar alrededor de las 8:00 de la mañana, complicó aún más la situación en las carreteras de acceso a Valencia, que ya estaban saturadas por el tráfico habitual de la hora punta.
Los problemas de tráfico no se limitaron a estas dos vías. La DGT (Dirección General de Tráfico) reportó que la A-3 también experimentó lentitud en la circulación, especialmente desde el kilómetro 337 en el polígono industrial Este hasta el 338 en Ventas del Poyo, así como en el tramo que va desde el kilómetro 350 en Quart de Poblet hasta el 352 en Mislata, ambos en dirección a Valencia. La congestión se extendió a otras vías importantes como la CV-30 y la V-21, donde los conductores enfrentaron atascos significativos.
La situación se volvió crítica en la V-30, donde las retenciones se extendieron desde el kilómetro 9 en el barrio de la Luz hasta el kilómetro 8 en Benimamet-Beniferri, en dirección al Puerto de Valencia. Además, se reportaron problemas en la V-21, con varios kilómetros de retenciones desde el kilómetro 14 en Alboraia hasta el kilómetro 18 en Valencia. La carretera CV-35 también mostró signos de congestión, con tráfico lento desde el kilómetro 6 en La Coma hasta el kilómetro 2.5 en Benimamet-Beniferri.
Los conductores que se dirigían hacia el aeropuerto de Manises también se vieron afectados por las retenciones en la V-30, lo que generó preocupación entre aquellos que tenían vuelos programados. La DGT aconsejó a los viajeros que planificaran sus desplazamientos con antelación y que consideraran rutas alternativas para evitar el tráfico pesado.
La combinación de accidentes y el tráfico habitual de la mañana han puesto a prueba la paciencia de los conductores en Valencia. La DGT ha instado a los automovilistas a mantener la calma y a ser conscientes de las condiciones del tráfico, recordando la importancia de la seguridad en la carretera. A pesar de los inconvenientes, no se han reportado heridos graves en ninguno de los incidentes, lo que es un alivio en medio de la frustración del tráfico.
A medida que avanza el día, se espera que la situación del tráfico mejore, pero los conductores deben estar preparados para posibles retrasos y seguir las recomendaciones de las autoridades de tráfico. La mañana del 16 de septiembre ha sido un recordatorio de la importancia de la precaución en las carreteras, especialmente en momentos de alta congestión y condiciones imprevistas.