La reciente visita de Alain Gilpin, CEO de World Rugby, a España ha marcado un hito en la historia del rugby nacional. Este encuentro no solo simboliza un acercamiento entre la Federación Española de Rugby y la organización mundial, sino que también representa una oportunidad única para el desarrollo del rugby en el país. Gilpin, con su vasta experiencia en el mundo del deporte y su enfoque en la profesionalización, ha traído consigo la promesa de una inversión significativa que podría cambiar el rumbo del rugby español.
### Un Nuevo Horizonte para el Rugby Español
La llegada de Gilpin a Madrid se produce en un contexto donde el rugby español ha enfrentado desafíos significativos, incluyendo la eliminación de competiciones mundiales debido a irregularidades administrativas. Sin embargo, la inversión de dos millones de euros por parte de World Rugby en 2025 es un indicativo claro de que la organización ve potencial en el rugby español. Esta inversión se destinará a diversas áreas, incluyendo la profesionalización de los equipos y la mejora de infraestructuras.
Gilpin, quien ha trabajado en empresas de renombre como IMG, ha enfatizado la necesidad de que España se convierta en un socio estratégico para World Rugby. Con casi 50 millones de habitantes y una economía robusta, España tiene el potencial de ser un referente en el mundo del rugby, especialmente en el ámbito hispanohablante. La visita de Gilpin también ha servido para establecer un diálogo más fluido entre la Federación y la comunidad internacional, algo que era escaso en el pasado.
La hoja de ruta presentada por el presidente de la Federación Española de Rugby, Juan Carlos Martin, incluye un enfoque en la profesionalización y la creación de un entorno competitivo que permita a España escalar posiciones en el ranking mundial. Actualmente, España ocupa el puesto 16 en el ranking masculino y el 13 en el femenino, lo que indica que hay un camino por recorrer, pero también un gran potencial por desarrollar.
### Estrategias para el Crecimiento y la Sostenibilidad
Una de las estrategias clave para el crecimiento del rugby en España es la implementación de políticas de profesionalización. Esto incluye la creación de concentraciones permanentes para las selecciones, algo que hasta hace poco no existía. La selección masculina, por ejemplo, se beneficiará de una ventana de partidos en noviembre, donde se enfrentará a equipos como Tonga e Inglaterra A. Estos encuentros no solo son una oportunidad para competir, sino también para atraer la atención de patrocinadores y aficionados.
Además, la Federación ha estado trabajando en la creación de un Centro Nacional de Rugby en Valladolid, que contará con instalaciones adecuadas para entrenar y desarrollar a los jugadores. Este centro no solo servirá como un lugar de entrenamiento, sino que también incluirá residencias para los jugadores, lo que facilitará su formación académica y deportiva. La inversión en infraestructuras es crucial para el desarrollo a largo plazo del rugby en España.
La diversidad del rugby español, que incluye competiciones en diferentes categorías y géneros, es otro de los atractivos para World Rugby. España es la única selección del Tier 2 que tiene equipos compitiendo en élite desde los sub-20 hasta los seniors, tanto en masculino como en femenino. Este enfoque integral es fundamental para asegurar la sostenibilidad del deporte en el país.
La Federación también ha presentado un proyecto para organizar una Serie del circuito mundial en España, con cuatro sedes propuestas. Este evento podría atraer a miles de aficionados y generar ingresos significativos, lo que a su vez permitiría reinvertir en el desarrollo del rugby en el país. La idea es consolidar un modelo de explotación que no dependa únicamente de las instituciones, sino que sea sostenible a largo plazo.
En resumen, la visita de Alain Gilpin y la inversión de World Rugby son pasos significativos hacia un futuro más brillante para el rugby español. Con un enfoque en la profesionalización, la creación de infraestructuras adecuadas y la diversificación de las competiciones, España tiene la oportunidad de convertirse en un competidor formidable en el ámbito internacional. La clave estará en la colaboración entre la Federación, los clubes y las instituciones para asegurar que el rugby en España no solo crezca, sino que también se consolide como un deporte de referencia en el panorama mundial.