La localidad de Aldaia ha tomado medidas decisivas para proteger a sus ciudadanos de posibles riadas, especialmente tras la devastadora tormenta que ocurrió el 29 de octubre del año pasado. Este evento trágico no solo causó daños materiales significativos, sino que también se cobró vidas humanas, lo que ha llevado al consistorio a actuar con rapidez y determinación. En un esfuerzo por evitar que la comunidad vuelva a enfrentar un desastre similar, el ayuntamiento ha implementado un plan de choque que incluye la instalación de compuertas anti riadas en el barranco de La Saleta.
La inversión total para este proyecto asciende a 1.800.000 euros, financiados tanto por el Estado como por la Generalitat Valenciana. Este plan no solo contempla la reposición de las compuertas que fueron destruidas durante la tormenta, sino que también se están instalando nuevas compuertas en áreas que podrían ser vulnerables a futuros desbordamientos. La instalación de estas compuertas comenzó el miércoles pasado y se espera que se completen en las próximas semanas.
### Medidas Inmediatas para la Seguridad de los Ciudadanos
El alcalde de Aldaia, Guillermo Luján, ha sido el encargado de supervisar el avance de estas obras. Durante su visita al Castell d’Alaquàs, donde se reunió con otros alcaldes afectados por la tormenta, Luján destacó la importancia de estas medidas para garantizar la seguridad de la población. «Estamos poniendo a prueba el sistema de compuertas hoy mismo. Hasta ahora, hemos tenido que utilizar diques de arena para evitar el desbordamiento, pero ahora contamos con compuertas que hemos instalado en lugares nuevos que consideramos críticos para la protección ante futuras danas», afirmó el alcalde.
Además de la instalación de compuertas, el plan incluye una fase adicional que consiste en rebajar el nivel del caudal del barranco de La Saleta. Esta acción tiene como objetivo aumentar la capacidad de contención de agua del barranco, lo que es crucial para mitigar el impacto de futuras lluvias intensas. La inversión para esta fase adicional se estima en 1,5 millones de euros, y se espera que esté finalizada para los meses de octubre y noviembre, justo antes de la temporada de lluvias.
El alcalde ha enfatizado que estas medidas son solo un primer paso en un plan más amplio que incluye el desvío del barranco de La Saleta, una obra que se considera fundamental para la protección a largo plazo de Aldaia. La comunidad está ansiosa por ver avances en este proyecto, que se ha vuelto una prioridad tras los eventos catastróficos del año pasado.
### La Respuesta de la Comunidad y el Gobierno
La respuesta de la comunidad ha sido positiva, con muchos ciudadanos expresando su apoyo a las acciones del ayuntamiento. Sin embargo, también ha habido críticas hacia la lentitud de las respuestas gubernamentales en relación con el desvío del barranco. Los alcaldes de los municipios afectados han solicitado al Ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, que se aceleren los trámites necesarios para llevar a cabo esta obra crucial.
Durante su visita a Alaquàs, el ministro se comprometió a trabajar en conjunto con los municipios para garantizar que se implementen las medidas necesarias para proteger a la población. La colaboración entre el gobierno local y el estatal es esencial para asegurar que se tomen las acciones adecuadas y se destinen los recursos necesarios para prevenir futuros desastres.
La instalación de compuertas y la mejora de la infraestructura del barranco de La Saleta son pasos significativos hacia la creación de un entorno más seguro para los residentes de Aldaia. La comunidad ha aprendido de la experiencia del pasado y está decidida a no repetir los errores que llevaron a la tragedia del año anterior. Con la implementación de estas medidas, Aldaia espera estar mejor preparada para enfrentar cualquier eventualidad climática en el futuro.
El compromiso del alcalde y del ayuntamiento es claro: la seguridad de los ciudadanos es la prioridad número uno. A medida que se avanza en la instalación de las compuertas y en la mejora del sistema de drenaje, la esperanza es que Aldaia se convierta en un modelo de resiliencia ante el cambio climático y los fenómenos meteorológicos extremos. La comunidad está unida en su esfuerzo por proteger su hogar y garantizar un futuro más seguro para todos sus habitantes.
